I Am a Killer es un juego de asalto en pantalla vertical estilo dibujos animados tridimensional. El jugador interpreta a un asesino frío y realiza una misión de asesinato en un edificio. Evita la vista de la seguridad y la vigilancia y encuentra formas de colarse en las profundidades. y asesina sin problemas. Apunta y evacua la escena, disfraza el asesinato como suicidio o muerte accidental para pasar de nivel.
1. Interpretación en profundidad: el asesino que interpretas no es una simple herramienta para matar, sino un personaje con un mundo interior y una historia de fondo complejos.
2. El arte de la estrategia: no solo pone a prueba tu velocidad de reacción y tus habilidades operativas, sino que también requiere que tengas un alto grado de observación y pensamiento estratégico.
3. El camino hacia el desafío: a medida que avanza el nivel, la dificultad general aumentará gradualmente, lo que requerirá que mejores continuamente tus habilidades y reacciones.
A medida que avance el magnicidio, poco a poco se irá revelando el pasado de este asesino, y entenderemos por qué se embarcó en este camino sin retorno, así como las fluctuaciones emocionales que se esconden detrás de la frialdad y determinación que mostraba al realizar tareas, evitando la seguridad y La vigilancia se convierte en una habilidad fundamental que debes dominar.
1. Al utilizar inteligentemente el entorno, crear interferencias o esperar la mejor oportunidad, puedes escabullirte de los ojos del enemigo y experimentar la emoción del sigilo supremo.
2. Desde las tareas simples iniciales hasta las escenas complejas posteriores, la cantidad de enemigos, su inteligencia y la disposición del equipo de monitoreo serán cada vez más difíciles.
3. Debes elegir la ruta más adecuada según tus preferencias y la situación actual. Este tipo de exploración divertida hace que el juego esté lleno de infinitas posibilidades.
1. La dificultad creciente mantiene un desafío duradero e inspira tu espíritu de lucha para superarte constantemente y buscar la excelencia.
2. Recorre cada rincón del edificio como un fantasma, evitando hacer ruido o llamar la atención del enemigo.
3. La acción silenciosa aumenta la tensión, haciendo de cada infiltración exitosa una victoria estimulante.