En los últimos años, la tecnología de inteligencia artificial se ha desarrollado rápidamente, aportando muchas comodidades a la vida de las personas. Sin embargo, detrás de esta tecnología se esconden enormes consumos de energía y problemas medioambientales. Un nuevo estudio de KnownHost revela la asombrosa huella de carbono de las herramientas de inteligencia artificial. Tomando como ejemplo a ChatGPT, sus emisiones mensuales de carbono equivalen a las emisiones combinadas de cientos de vuelos transatlánticos, lo que genera preocupaciones sobre el desarrollo sostenible de la tecnología de inteligencia artificial.
Recientemente, un nuevo estudio realizado por el proveedor de alojamiento de sitios web KnownHost reveló la asombrosa huella de carbono de las herramientas de inteligencia artificial (IA). Los datos muestran que ChatGPT por sí solo atrae a más de 164 millones de usuarios cada mes y genera hasta 260.930 kilogramos (unas 260 toneladas) de dióxido de carbono, equivalente a las emisiones de carbono de 260 vuelos de Nueva York a Londres. Esto pone de relieve el enorme impacto que la tecnología de IA tiene en el medio ambiente mientras se desarrolla rápidamente.
Con la popularidad de la IA, la demanda de energía de los centros de datos también está aumentando considerablemente. Una investigación del Berkeley Lab muestra que la demanda de energía en los centros de datos de EE. UU. se duplicará con creces entre 2017 y 2023, mientras que un informe de la Agencia Internacional de Energía predice que para el próximo año, los avances tecnológicos como los centros de datos, la inteligencia artificial y las monedas digitales utilizarán la cantidad. Es probable que el consumo de energía se duplique nuevamente, y un tercio de ese crecimiento provendrá de los propios centros de datos. Esta tendencia ha llevado a la administración Biden a proponer soluciones al consumo de energía de los centros de datos, pidiendo el uso de "energía limpia" para operar estas instalaciones.
Según los informes, ChatGPT consume más de 500.000 kilovatios hora de electricidad cada día, lo que equivale al consumo eléctrico diario de más de 17.000 hogares estadounidenses. Los científicos de datos del Banco Nacional Holandés predicen que para 2027, el consumo anual de electricidad de toda la industria de la IA alcanzará entre 85 y 134 teravatios hora. Elon Musk, director ejecutivo de Tesla, también advirtió que la escasez de energía se convertirá en el principal factor que limitará el desarrollo de la IA en los próximos dos años.
El asombroso consumo de energía de la IA se considera su "secreto sucio". Leslie Miley, asesora técnica del director de tecnología de Microsoft, señaló que el consumo de energía de la IA generativa supera incluso al de los servicios ordinarios en la nube. Una investigación de la Universidad de Harvard y UCLA confirmó además que las emisiones de carbono de los centros de datos de EE. UU. se han triplicado desde 2018, y ahora representan el 2,18 % del total de las emisiones de carbono de EE. UU. y consumen aproximadamente el 4,59 % de la energía total del país.
Existe una marcada contradicción entre el rápido desarrollo de la tecnología de inteligencia artificial y el creciente consumo de energía y los problemas ambientales. Cómo equilibrar el desarrollo de la tecnología de inteligencia artificial y la protección del medio ambiente se ha convertido en una cuestión importante que tenemos ante nosotros. En el futuro, la industria y el gobierno deberán trabajar juntos para explorar un camino de desarrollo de la IA más ecológico y sostenible para garantizar que la tecnología de la IA beneficie a la humanidad sin dañar la Tierra.