El ex CEO de Google, Eric Schmidt, advirtió recientemente sobre los riesgos potenciales de la inteligencia artificial. Le preocupa particularmente que las organizaciones terroristas y los "países deshonestos" puedan usar la tecnología de IA, especialmente la tecnología de fabricación de armas biológicas, para causar un gran daño a las personas inocentes. Schmidt exige una regulación efectiva de las compañías de IA para reducir el riesgo de abuso, pero también advierte que la regulación excesiva puede matar la innovación. También recomendó restringir la exportación de microchips avanzados a ciertos países para retrasar su desarrollo de IA y expresar su preocupación por el uso excesivo de las redes sociales y los teléfonos inteligentes de los niños, abogando por la protección de los menores.
El ex CEO de Google, Eric Schmidt, recientemente expresó su preocupación por los riesgos potenciales de la tecnología de inteligencia artificial (IA) en una entrevista con la BBC. Señaló que los terroristas y los "estados deshonestos" pueden usar la tecnología de IA para poner en peligro a personas inocentes, especialmente la posibilidad de hacer armas biológicas.
Schmidt mencionó que países como Corea del Norte, Irán y Rusia pueden adoptar esta tecnología emergente para cometer un comportamiento malicioso. Hizo hincapié en que esta tecnología ha progresado rápidamente y que cualquier persona con intenciones maliciosas puede dominar rápidamente y abusar de la tecnología, causando daños graves. Mencionó específicamente una situación de "Osama bin Laden", diciendo que si algunas personas malvadas controlan la tecnología moderna, representaría una gran amenaza para personas inocentes.
Schmidt pidió una regulación gubernamental efectiva de empresas de tecnología privada que desarrollen IA, creyendo que esto podría reducir el riesgo de abuso tecnológico. Sin embargo, también advirtió que la sobreregulación podría obstaculizar la innovación. Dijo que el futuro de la IA está construido principalmente por empresas privadas y que el gobierno necesita proporcionar una supervisión adecuada para garantizar el uso seguro de su tecnología.
Con respecto a la política de control de exportaciones de EE. UU., Schmidt estuvo de acuerdo, creyendo que las exportaciones de microchips poderosos a ciertos países deberían restringirse a retrasar el progreso del adversario en la investigación de IA. Mencionó que el ex presidente Joe Biden había restringido la exportación de microchips a otros países, excepto 18 países, y esta decisión puede ser revocada por Trump en el futuro.
Cuando se habla del impacto de las redes sociales y los teléfonos inteligentes en los niños, Schmidt expresó su preocupación por la seguridad de los niños. Él cree que si bien los teléfonos inteligentes pueden ser seguros, el uso debe estar moderadamente regulado para proteger a los niños del mundo en línea. Él aboga por restringir el uso de niños menores de 16 años en las redes sociales y cree que es irresponsable realizar experimentos a gran escala y no controlados en la próxima generación.
Los comentarios de Schmidt atrajeron la atención en la reciente cumbre de acción de IA, y los Estados Unidos y el Reino Unido se negaron a firmar el acuerdo, lo que provocó una discusión generalizada. Pidió un equilibrio entre la regulación y la innovación en el desarrollo de la IA y garantizar que el avance tecnológico no dañe a la sociedad.
Puntos clave:
A Schmidt le preocupa que la tecnología de IA pueda ser abusada por terroristas y "estados deshonestos" para causar daño a personas inocentes.
Pidió al gobierno que regule a las empresas de tecnología privada mientras estaba alerta a la posibilidad de que suprima la innovación sobre la regulación.
El impacto en el uso de los teléfonos inteligentes por parte de los niños ha atraído la atención, y Schmidt aboga por restringir el uso de menores en las redes sociales para proteger su seguridad.
Las preocupaciones de Schmidt reflejan la ansiedad global compartida sobre el rápido desarrollo de la tecnología de IA y los riesgos potenciales. Cómo equilibrar la seguridad y la innovación es un problema importante que enfrenta gobiernos y empresas de tecnología en varios países, y requiere esfuerzos conjuntos del mundo para encontrar soluciones.