El 21 de octubre, Dow Jones, una subsidiaria de News Corporation del magnate de los medios Rupert Murdoch, y el New York Post presentaron una demanda contra la startup de inteligencia artificial Perplexity, diciendo que había hecho “copias ilegales masivas” de sus obras protegidas por derechos de autor.
El campo de rápido crecimiento de la inteligencia artificial generativa ha dado lugar a muchos problemas relacionados con la propiedad intelectual. El "Guardian" británico informó en un informe que la demanda fue un feroz enfrentamiento entre editores de contenidos y empresas de tecnología por cuestiones de derechos de autor. Según la demanda presentada por Dow Jones y el New York Post en el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, Perplexity utilizó un "esquema descarado" para explotar contenido valioso producido por los editores de forma gratuita mientras competía por el mercado de "lectores" no autorizados. contenido y, por lo tanto, requiere compensación.
Perplexity AI no respondió de inmediato a un correo electrónico en busca de comentarios.
En junio de este año, Perplexity también fue acusado de plagio por Forbes y el medio tecnológico Wired, alegando que su contenido informativo se encontró en la herramienta Pages de Perplexity. Luego, Perplexity comenzó a buscar cooperación con los medios de comunicación y anunció un nuevo plan de reparto de ingresos para los editores el 30 de julio. El plan establece que en los próximos meses, Perplexity compartirá un porcentaje de los ingresos publicitarios con los editores cuando su contenido sea citado en las respuestas generadas por IA. Time, Der Spiegel, Fortune, Entrepreneur, The Texas Tribune y la plataforma de contenidos y medios WordPress.com se convierten en las primeras empresas en unirse al programa de reparto de ingresos.
Como parte del programa, los editores también recibirán acceso a la API Perplexity, que se puede utilizar para crear cuentas personalizadas de Answer Engine y Enterprise Pro, además de estar disponible para todos los empleados de los editores que participan en el programa One-year Enterprise. Oferta profesional con funciones mejoradas de seguridad y privacidad de datos.
Informes relevantes muestran que Perplexity AI, que se estableció hace dos años, fue cofundada por el ex investigador de OpenAI Aravind Srinivas, el científico investigador de Meta, el director de tecnología de Perplexity, Denis Yarats, y otras dos personas. Perplexity proporciona a los usuarios un chatbot de IA que resume los resultados de búsqueda, enumera las fuentes de citas para las respuestas y ayuda a los usuarios a refinar sus consultas para obtener la mejor respuesta. Perplexity utiliza varios modelos de lenguaje grandes (LLM) para generar resúmenes, incluido GPT de OpenAI y el modelo de código abierto Llama de Meta. Con su excelente desempeño en el campo de las búsquedas, los expertos creen que la empresa puede impactar el mercado de los motores de búsqueda dominado por Google.
Varios medios de comunicación de Estados Unidos han demandado anteriormente a empresas de inteligencia artificial generativa por infracción de derechos de autor. El 27 de diciembre de 2023, el "New York Times" anunció que había presentado una demanda ante el Tribunal Federal del Distrito Sur de Nueva York, acusando a Microsoft y OpenAI de infracción de derechos de autor, abuso de los derechos de propiedad intelectual de los medios y "copiar y utilizando millones" de artículos. Los grandes modelos de lenguaje utilizados para capacitar a las dos empresas ahora compiten directamente por el contenido del artículo.
Posteriormente, tres medios de noticias digitales estadounidenses, The Intercept, Raw Story y AlterNet, presentaron una demanda por infracción de derechos de autor contra OpenAI el 28 de febrero de este año. Creen que OpenAI viola la Ley de Derechos de Autor del Milenio Digital y que los puestos de trabajo de los periodistas están amenazados, mientras que OpenAI se beneficia del arduo trabajo de los periodistas.
OpenAI no cuestionó el uso del trabajo del New York Times sin consentimiento, ni cuestionó las reclamaciones de infracción de derechos de autor presentadas por The New York Times, pero argumentó que dicha infracción estaba justificada según la doctrina del uso justo. Al mismo tiempo, OpenAI ha firmado acuerdos de cooperación con varias empresas de medios para proporcionar financiación para obtener el contenido de estos medios.
Las sucesivas demandas presentadas por empresas de medios de comunicación contra OpenAI reflejan las preocupaciones actuales de la industria de las noticias sobre la tecnología de inteligencia artificial. Esta tecnología no sólo infringirá los derechos de autor de la creación de contenidos, sino que también reducirá los ingresos publicitarios de los medios y dañará la calidad de las noticias en línea. La intrincada relación entre la innovación en inteligencia artificial y la protección de los derechos de autor se ha convertido en una cuestión que merece la atención de los legisladores.